“Ha sido una auténtica dedicación. Yo he encontrado en la literatura el refugio que no encontraba tan perfecto en el cine o en el café o en la tertulia o en el juego. La relación de dos se establecía perfectamente entre una persona y un libro”
El pasado Viernes, a los 89 años de edad, nos dejaba sin palabras un grande de nuestra literatura.
“Mi afán al escribir era intentar comunicar a dos personas, emplear la pluma como elemento de comunicación con otros, y creo que esto se establece con una novela o con un poema”
Autor de unas 60 obras entre novelas, libros de viajes y diarios, Miguel Delibes obtuvo en 1947 el Premio Nadal por “La sombra del ciprés es alargada”. Varias veces candidato al Premio Nobel de Literatura, en 1973 ingresó en la Real Academia Española, otorgándosele en 1982 el Premio Príncipe de Asturias de las Letras y en 1993 el Premio Cervantes.
Su último trabajo, aparecido en 2006, es una recopilación de relatos breves titulada “Viejas historias y cuentos completos”.
“Los caminos de la novela son infinitos y de vez en cuando hay que echar un pulso a los deseos. Siempre he hecho lo que pretendía. No aspiraba a abrir caminos, sino a perfeccionar el mío”
“La sombra del ciprés es alargada”, “El camino”, “Diario de un cazador”, “La hoja roja”, “Las ratas”, “Cinco horas con Mario”…
“El principe destronado”, “El disputado voto del señor Cayo”, “Los santos inocentes”, “Señora de rojo sobre fondo gris”, “El hereje”…
“Soy un narrador rural apasionado por la naturaleza”
Gracias, Miguel, por enriquecernos tan maravillosamente el camino.
3 comentarios:
Me uno en tu agradecimiento. Ha sido un compañero de viaje durante muchísimos años. Y lo seguirá siendo.
Gracias a tí también, Noelio.
No he leído mucho a Delibes,pero lo que leí me gustó.
Voy a intentar leer ahora"La sombra del .....".
Gracias por tu información
Buena elección, Ángeles. Yo la leí hace ya tiempo, en mi época de instituto.
Yo me estoy leyendo ahora "El príncipe destronado". Como una especie de homenaje.
Porque seguirá siendo siempre, como dice Alicia, un gran compañero de viaje.
Besos a las dos lectoras.
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